¿Has soñado alguna vez con que vuelves atrás en el tiempo?
Yo sí, soñaba que cambiaba todos los errores que había cometido y que mi vida tenía
un sentido al despertar, pero no es así porque si no hubiera cometido esos
errores no hubiera soñado con que los cambiaba por lo que se hace imposible
cambiarlos.
Ya ves en la vida tanto los errores como los aciertos tienen
una razón de ser, no sería la persona que soy hoy de no ser así, no tendría las
amistades que poseo que aunque a veces tenga decepciones siempre están ahí si
los necesito, tampoco tendría los recuerdos de épocas que la sonrisa no era una
opción, era una obligación, porque pequeños detalles descubrieron incluso que
puedo derramar lágrimas de alegría.
Ahora estoy mal, me corrijo, muchos estamos mal, por esta realidad que nos ha tocado vivir, donde la armonía se rompe a cada paso, si el destino cava un agujero cada cinco pasos.
La vida se parece mucho al juego de escaleras y toboganes,
de repente puedes avanzar sin problema, pero en otras ocasiones desciendes
desde el algún punto que veías cercano al final, pero el juego no termina hasta que todos llegan a la meta.
Subir, bajar, reír, llorar, sentir, sufrir, avanzar, retroceder… eso es vivir,
y el que no lo entienda que no se amargue porque llegara el día en que la
suerte cambie y la vida depare algo maravilloso, yo lo he vivido, hoy te lo
cuento como un amigo que cuenta los minutos que recuerda contigo.
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