martes, 3 de febrero de 2015

Distinto el café, distinta la vida

Ha pasado el tiempo, y la energía ha cambiado… ya apenas me acuerdo de lo que era tener tu presencia, de lo que era despertar cerca de ti cada mañana, incluso el café me sale distinto desde que tú no estás. He mirado todas las noches al cielo desde que marché ya aquel lejano octubre, escapándome de ti, de mí mismo, y de todo lo que me rodeaba en ese momento, aunque muchas cosas deje atrás no podría decidir si son buenas o malas. Aunque si me paro a pensar en tí fríamente no merece la pena cada pensamiento que te he dedicado desde que te conozco, pero para que engañarnos soy preso de ti y de mi concepto idealista que tenia del tiempo que pase contigo. Pero qué le vamos a hacer si me he convertido en un cazador que ha perdido su arma. Siempre que me paro frente a esta pantalla las ideas que salen de mi cabeza son un poco absurdas, pero siempre me acuerdo de mi historia y analizo como he llegado hasta aquí, y supongo que cada decisión me ha traido hasta aquí por elección propia, nada de misticismos extraños. Y ya ves hoy por hoy mi vida ha cambiado en diferentes aspectos, casi inapreciables pero tan claros como dos gotas de lluvia en un día despejado. Así que si pensara en una forma de decir lo que pienso es que he dejado de soñar porque he descubierto la manera de vivir.

No hay comentarios:

Publicar un comentario