domingo, 16 de junio de 2013

Gota a gota, olvido

Yo no sé si es verdad que el amor nos deja estúpidos, pero realmente he comprobado que rebaja la inteligencia, y nos hace perder nuestra libertad, para amarrarnos en nuestros pensamientos a las cadenas que se desprenden de su concepto en nuestro pensamiento.

“Fuera de aquí” le digo cada día, pero se niega, joder, a ver si me olvido de su carita de ángel que me perturba cada mañana cuando no la veo por ningún lado, y me pierdo buscándola hasta tal punto que despierto en un banco cualquiera pues por ella, mis sueños, me hicieron convertirme en un sonámbulo que busca a su musa desesperadamente, que no distingue lo real de los ficticio, vaya suplicio.

Pero eso tiene que terminar, las fotos que me quedan las borrare, su número desaparecerá de mi agenda, y su imagen no será portada en mi cabeza.


Aunque me cueste desprenderme del sentimiento más bonito que la vida me enseño, el sendero del olvido, sin temor, he de emprender, pues silencios más finos que la soledad he vivido cuando en la cama contigo estaba, y solo escuchaba mis propias palabras, ya que por ser ciego, no vi venir que tu pasabas de todo, metiéndome en acordes que no sabía tocar, para entre las cuerdas del amor perderme y no poder regresar, sin realizar desbordamientos de mi memoria, para ver si por fin gota a gota, mis defensas me ayudan y rechazan tu existencia.

No hay comentarios:

Publicar un comentario